En la actualidad, la mayoría de las personas no están acostumbradas a tomar actitudes de tranquilidad en sus trabajos.
La sonoterapia es algo desconocido para la mayoría de las personas, sin embargo, ésta radica desde la antigüedad, en donde se utilizaban las mismas técnicas que hoy forman parte de la base de ésta terapia con sonido, la cual a través de la utilización de las vibraciones del sonido, más el poder de nuestra intención, aportamos el reconocimiento auto sanador contagiando la energía, con el fin de armonizar aquello que se encuentra en desequilibrio.
A través de un tratamiento de sonoterapia, podemos lograr crear un ambiente grato y distendido en nuestro entorno laboral, y de esta manera, incluso, lograr más productividad.
Estudios científicos avalan esta terapia, ya que se ha comprobado que las ondas y energías de los instrumentos que se utilizan (didgeridoo, cuencos de cuarzo, tibetanos, palos de agua, etc.) actúan de manera positiva en el sistema del cuerpo humano. Estos sonidos rítmicos repetitivos logran reducir y armonizar los impulsos eléctricos que se manifiestan en nuestro cerebro, siendo capaz de pasar de una longitud de onda a otra más tranquila y relajada.
Los efectos de la sonoterapia, se verán manifestados en todo nuestro organismo debido a la activación de funciones cerebrales y neuronales, esto produce mejor productividad, más concentración, mayor creatividad, y colabora a vivir en un ambiente sin estrés, y de esta manera, lograr ser personas saludables física, mental y emocionalmente.
SUS BENEFICIOS:
° Distensión muscular
° Disminución del ritmo cardíaco
La sono terapia
Hoy en día, la aplicación de la sonoterapia está aumentando rápidamente gracias a su inmediata y permanente sensación de bienestar. Si bien es cierto, este no es un tratamiento nuevo, en algún instante de la historia de la humanidad se dejó de utilizar. Afirmamos esto, pues los egipcios 1500 a. C. ya utilizaban los sonidos para provocar sensaciones placenteras en el cuerpo y celebrar rituales de fertilidad. También, se menciona en las enseñanzas de la Biblia como cuando David efectuaba música para curar las dolencias del Rey Saul. Podríamos mencionar muchos más, pero lo fundamental es el reconocimiento sanador de los sonidos en armonía que se manifiesta en nuestro organismo.
